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Operaciones brillantes «siempre».

Como consultores en finanzas corporativas, no es infrecuente que nuestros clientes nos planteen la oportunidad de estructurar y ejecutar un Management Buy-In (MBI), una modalidad de Leveraged Buyout (LBO) en la cual un ejecutivo o un equipo de gestión externo a la compañía a comprar deciden adquirirla, con el apoyo financiero de inversores profesionales o private equity, y reemplazar parte o todo el actual equipo directivo. Habitualmente se adquiere la totalidad del capital de la empresa objetivo o una mayoría amplísima, quedando protegidos los compradores para ejecutar posteriormente una posible salida o liquidación de la inversión en la empresa objetivo.

El MBI es una opción relativamente habitual en las adquisiciones de empresas, sobre todo cuando no se tiene la convicción (por parte de los promotores del MBI y de los financiadores de la operación) que la gestión efectuada por el equipo directivo actual es netamente mejorable.

Los MBI son operaciones que casi siempre se realizan cuando los promotores conocen a fondo el sector y el mercado en el que opera la empresa que se adquiere. Y por lo general el nuevo equipo está o estará dirigido (cuando culmine el proceso) por un director general o un consejero delegado con gran experiencia a nivel de director ejecutivo.

La principal diferencia del MBI respecto al MBO (Management Buy-Out) es la posición en la que se encuentra el comprador. En el caso del MBO, el comprador (el equipo directivo) ya trabaja para la empresa que compra –también con la ayuda de socios financieros-, mientras que en el MBI el comprador es un agente externo, normalmente alguien que ha trabajado en la competencia de la empresa objetivo, o en uno de sus proveedores o clientes importantes. Esta posición permite al promotor o promotores tener un conocimiento previo importante de la empresa a comprar.

Existe también la posibilidad de una combinación de ambos procesos de adquisición de empresas, un Buy-In Management Buy-Out (BIMBO). En este caso, el equipo que compra la empresa es una combinación de directivos externos con socios que mantienen su inversión en la compañía, siempre con el apoyo de socios financieros, excepto operaciones de tamaño muy pequeño.

Tanto el MBI como el MBO son operaciones complicadas desde un punto de vista técnico, financiero, legal y fiscal. Por ello, es totalmente recomendable asesorarse con expertos en finanzas corporativas que tengan experiencia demostrable en este tipo de operaciones. En caso contrario, aumentan enormemente las posibilidades de fracasar en el intento u obtener acuerdos que impiden hacer una operación brillante o simplemente viable, tanto a corto plazo (la supervivencia de la empresa objetivo) como a largo plazo (la ulterior salida de los compradores).

ArsCorporate asesora a sus clientes tanto en la identificación y análisis de las potenciales empresas objetivo de adquisición, así como en la estructuración de la operación, la búsqueda de financiación y la propia ejecución de la compra (sea MBO, MBI o BIMBO), teniendo interlocución con los accionistas vendedores, con casa de private equity, proveedores de financiación propia o ajena.

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